Dinah Schonhaut
Durante los días 26 y 27 de octubre se desarrolló el Seminario Internacional “La Ruta del Esclavo en el Río de la Plata: aportes para el diálogo intercultural". Este espacio fue concebido con el objetivo de reflexionar sobre la incidencia de uno de los fenómenos históricos más dolorosos y trágicos de la humanidad. Entrevistamos al Prof. Toyin Falola, quién expuso sobre temas ligados a la música, literatura, religión e identidades en la diáspora africana.
Durante estas jornadas, organizadas por la Cátedra UNESCO de Turismo Cultural Untref/Aamnba y que tuvieron como sede al Auditorio de la Asociación Amigos del Museo Nacional de Bellas Artes, desfilaron una nutrida lista de investigadores e intelectuales de diferentes países (Argentina, Nigeria/Estados Unidos, Uruguay, Brasil, Cuba, Haití, España, Francia, Senegal, Argentina/Paraguay y Costa de Marfil). Allí fueron presentadas conferencias magistrales que abordaron cuestiones axiales como la vinculación del Proyecto Internacional de la Ruta del Esclavo con el diálogo intercultural de África y América Latina; la presencia africana en el Río de la Plata; los legados del África; y las consecuencias del tráfico de esclavos en las sociedades africanas.
Quilombo! dialogó con el nigeriano-estadounidense Toyin Falola, Doctor en Historia, Profesor de la Universidad de Texas en Austin y Especialista en historia de África y de los afroamericanos, quién reflexionó sobre arte, cultura e identidades.
¿Cómo piensa que la cultura, el arte o la religión pueden configurar o crear una identidad negra latinoamericana sin caer en la banalización o exotismo de estas prácticas?
El arte y la cultura han sufrido un proceso general de comercialización, incluso el candomblé por ejemplo también puede caer en eso, en ese sentido creo que es necesario respetar la religión de otros, el candomblé es la religión de algunos y tiene que ser aceptada. En segundo lugar, a las identidades también hay que respetarlas, como así también ciertos elementos de la cultura que están dentro de esas identidades que deben ser enseñados. No podemos detener tal vez la venta o comercialización de productos, sin embargo sus significados y sus símbolos, deben ser tratados como merecen.
¿Considera que la fusión de las artes afro con otros lenguajes contemporáneos del arte, es posible?.
Lo que está pasando es que quienes consumen la cultura lo hacen de manera diferente. Muchas veces no están realmente interesados en esto, hay algunos que consumen cultura porque sí y otros que lo hacen sólo por entretenimiento. Podemos definir así dos grandes grupos. Luego está el mercado, los gobiernos que hacen política y utilizan la cultura para entretener, para conferencias… hacen un marketing político de la cultura. Así, estos elementos diversos no son lo mismo. Finalmente, hay gente que usa la cultura para la identidad y lo hace de manera muy diferente. Hay gente que se siente ofendida porque se politiza su cultura o se comercializa. Pero hay muy poco que puedan hacer al respecto, hay que tener en cuenta eso.
La “cultura de la felicidad” del africano, ¿puede ser un proyecto político para las identidades negras en América Latina? ¿Se puede proponer la felicidad como un valor?.
Eso es lo que han hecho en África, en parte de Estados Unidos y lo están haciendo en Brasil, de hecho se puede hacer… Hay comunidades que mantienen la cultura, también hay movimientos que apoyan a las comunidades e implantan la cultura a sus hijos. Hay gobiernos, universidad, asociaciones internacionales que lo promueven.
¿Usted piensa que la consciencia negra puede darse por una identidad cultural y no racial?.
Sí, si uno ve el movimiento negro en Nueva York en los ’20 en Harlem, o el caso de los afrobrasileños… podemos hacerlo deliberadamente, podemos hacerlo como personas, como proyectos sociales, escolares, como un movimiento, se puede tener iglesias que lo hagan, se puede hacer a través de la ropa que se usa, etc. Cada persona tiene un rol importante que puede jugar para crear identidad, no hay que dejarlo sólo en manos del gobierno, no funciona así.
¿Personas que no sean negras pueden incidir en este proceso?.
Si y es posible de dos maneras: primero haciendo que la gente acepte alguna de estas ideas: en mis conferencias yo hablo de la cultura afroamericana con el origen de la música como el jazz, el rock o el samba en Brasil, porque la gente se involucra con esto también. La otra manera es en términos de resistencia: se genera una identificación con ciertos simbolismos que van desde el nombre, la ropa… De varias maneras se puede lograr.
+ info: www.toyinfalola.com
Fuente: Revista Quilombo
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario