Caserío de los Negros. Las ruinas se encuentran en la planta de alcoholes de Ancap y datan de fines del siglo XVIII | Partido Nacional inició contactos con el gobierno para revalorizar el lugar.
ANDRÉS LÓPEZ REILLY
La propuesta de hacer un memorial sobre la esclavitud es impulsada por el Partido Nacional, que ha iniciado una serie de contactos con el gobierno para hacerlo en los restos del tristemente célebre "Caserío de los Negros", ubicado en Capurro.
La Comisión Departamental de Montevideo del Partido Nacional -en el marco de la conmemoración del "Año Internacional de los Afrodescendientes"- inició una ronda de contactos para reivindicar el valor histórico del denominado "Caserío de los Negros" y solicitar la construcción de un memorial de la esclavitud en ese sitio histórico que se encuentra en la planta de alcoholes de Ancap.
Una delegación integrada por la diputada Ana Lía Piñeyrúa y el edil departamental Daniel Martínez -promotor de la iniciativa- se reunió con el presidente de Ancap, Raúl Sendic, con el ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, y con el director de la Secretaría de Derechos Humanos de esa cartera, Javier Miranda.
"Una declaración, por más trascendente que sea, no es suficiente. Se trata de una posibilidad única de hacer un memorial a la esclavitud en un sitio histórico. Hay que recordar que los afrodescendientes son el 10% de la población del país, que fueron traídos como esclavos, como objetos de mercancía de cambio. Y que se trata de una colectividad que dio su vida durante la gesta artiguista por un ideal de justicia e igualdad", declaró a El País el edil Daniel Martínez.
En octubre de 2007 se firmó un convenio entre Ancap, el Ministerio de Educación y Cultura y la Intendencia para la recuperación de los restos arqueológicos del "Caserío de los Negros", que también fue objeto de estudio por parte de la Facultad de Humanidades y Ciencias. Algunos meses antes, este conjunto arquitectónico había sido declarado Monumento Histórico Nacional por el Poder Ejecutivo. Pero cuatro años después, el lugar sigue siendo de acceso restringido.
EL TRÁFICO. El "Caserío de los Negros" fue construido para albergar, curar y "engordar" a los esclavos que llegaban desde Brasil y África. Entre las empresas que realizaban este tráfico, se destacaba la española Real Compañía de Filipinas, autorizada a transportar hacia América de 5.000 a 6.000 negros por año.
Según señalan Aníbal Barrios Pintos y Washington Reyes Abadie en "Los Barrios de Montevideo", en 1787, ante la inminencia de la llegada del primer cargamento de la Compañía de Filipinas, el Cabildo montevideano, por temor al contagio de las enfermedades que los desembarcados podrían desencadenar en la ciudad, obligó al representante de la Compañía, José de Silva, a construir "habitación bastante para los negros que se esperan y demás que sucesivamente vendrán a este puerto en la boca del arroyo Miguelete, hacia la parte del Cerro, que es el paraje que está a la costa del mar y se nombra Jesús María, distante de esta ciudad tres cuartos de legua, en cuyo puesto deberán permanecer precisamente como el más cómodo para ellos mismos y sin riesgo alguno para el público".
El motivo por el cual se había escogido ese lugar era que "soplan generalmente vientos del Este y Sureste (y) estos vientos reinantes defienden a esta población, como opuesta a aquél lugar, de todo contagio en los hálitos".
Hoy, para ingresar al predio donde se encuentra el "Caserío de los Negros" (ubicado bajo el edificio del antiguo Instituto de Química que se encuentra en la planta de Ancap), es necesario transitar por una zona que antes fue camposanto: es que si alguno de los esclavos moría, debía ser enterrado allí.
EL LUGAR. Barrios Pintos y Reyes Abadie señalan que en sus comienzos el establecimiento no era más que un galpón que luego fue objeto de sucesivas modificaciones, hasta que tuvo cinco piezas, grandes almacenes y cocina, con muros de material y techos de teja.
Durante los dos sitios que sufrió Montevideo, entre 1811 y 1814, el Caserío sirvió como asiento de tropas de la guarnición de la ciudad. Sirvió también - según el cronista Isidoro de María- de alojamiento temporario a las tropas que evacuaron la ciudad en el mes de junio de 1814. Tras una inspección realizada por el Cabildo en febrero de 1816, se constató que el estado del caserío era lamentable. Las habitaciones habían sido destechadas, faltaban 40 puertas y ventanas con sus marcos y unas 8 puertas y marcos de las piezas de la azotea. En 1902, la municipalidad dispuso la demolición de las ruinas a las que, por entonces, había quedado reducido el "Caserío de los Negros".
Martínez. "Una declaración no alcanza, es una oportunidad de hacer algo".
VENDIDOS Y FUGADOS
En la imagen superior, un aviso publicado el 14 de diciembre de 1837 en "El Universal", ofreciendo una recompensa por un esclavo fugado. Abajo, otro aviso del mismo periódico sobre la venta de una negra "sana y sin vicios" por $ 380.
El buque "negrero" hundido en Punta
Otro vestigio histórico que no pudo ver la luz
El buzo Héctor Bado, responsable de las últimas operaciones de rescate del Graf Spee, trabajaba en 1998 en dos naufragios en Punta del Este cuando denunció el hallazgo del navío Sea Horse, hundido en 1726. Sin embargo la prospección del naufragio fue detenida por la Comisión de Patrimonio Histórico porque el buque se encontraba dentro de un circuito de especial interés para la Unesco, por tratarse de un navío negrero.
El Sea Horse se fue a pique frente a la Isla Gorriti el 29 de septiembre de 1728 cuando se dirigía hacia Buenos Aires con sus bodegas atestadas de esclavos. Aunque llevaba un cargamento lícito, trató de evadir la patrulla de Maldonado: traía también una importante carga de lingotes de oro de contrabando que había cargado en Colonia del Sacramento.
Pero la decisión fue desafortunada. A la pérdida de más de 400 esclavos que ya había tenido debido a las condiciones del viaje, debió sumarse la de otras 23 personas -entre las que se encontraba su capitán- que murieron cuando el navío se fue a pique al intentar circunvalar la isla en la turbiedad de la noche. Durante los siguientes 30 años, y a pesar de las dificultades de bucear en esa época entre las rocas, los españoles recuperaron el oro y las monedas de plata.
El Sea Horse permanece sumergido a una profundidad de entre 3 y 10 metros. Y lo mas valioso que queda de él son 17 de sus 22 cañones, que lucen el escudo de la South Sea and Fishing Company, empresa entonces dueña del Real Asiento de Negros de Buenos Aires. Como testigo de la oscura función del buque, descansan en el lecho marino las anillas de bronce donde se amarraban los prisioneros.
La semana pasada, a través de El País, Bado denunció desde Estados Unidos la venta ilegal de objetos tomados de un naufragio de Cabo Polonio, que salieron del país sin contar con las autorizaciones correspondientes.
El País Digital
Cuidar el Caserío de los Negros (Diario La República)
En el año del Bicentenario son muchas las conmemoraciones que se reivindican en nuestro país. La semana pasada, El Partido Nacional festejó los 175 años de su fundación, destacando ese ámbito del bicentenario. El viernes, la diputada del sector, Ana Lía Piñeyrúa, reclamó al Ministerio de Cultura la construcción de un memorial de la esclavitud en el lugar conocido como "Caserío de los Negros", cuyos restos fueron ubicados en la planta de alcoholes de Ancap. Piñeyrúa destacó que este año coincide con el "Año Internacional de los Afrodescendientes". Los restos del "Caserío de los negros", que fue construido hacia 1787 con la finalidad de albergar a los esclavos, fueron ubicados en la planta de alcoholes de Ancap en la zona de Capurro. Su importancia ha sido destacada en varias instituciones estatales que también buscan como preservar y proteger esos vestigios.
Diario La Republica 15/8
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